Cuando se está
desempleado hay ciertas dificultades que debemos superar. Existen
dificultades en las que no se puede influir personalmente (dificultades externas), no
las puedes modificar, pero reconocerlas, analizarlas y buscar
soluciones, te ayudará a tomar decisiones en el momento de planificar tu
búsqueda. Dentro de estas dificultades externas es de destacar la escasez
de empleo, el aumento del nivel de exigencias de las empresas, el aumento del número
de candidatos para una misma oferta, las pruebas de selección son cada vez más severas,
etc.
Pero
existen otras dificultades en las que sí que podemos influir
personalmente, son las denominadas dificultades
internas. Dentro de este tipo destaca:
El estado
emocional bajo: no nos podemos dejar llevar por el desánimo, es muy
importante mantener un estado de ánimo positivo. Nuestro estado de ánimo se
reflejará en la actitud con la que encauzamos la búsqueda de empleo. Somos nosotros mismos los que tenemos el
difícil trabajo de vendernos.
Sensación de
inseguridad a la hora de enfrentarte a la búsqueda de empleo: la inseguridad es consecuencia del
miedo a lo desconocido, por eso es clave un buen cometido de análisis de la
situación actual del mercado laboral. Cuanto mejor conozcamos nuestro objetivo
profesional, sus salidas profesionales, etc., menores serán nuestras dudas y
nuestras expectativas serán más reales.
Inseguridad a
la hora de afrontar una entrevista personal: debemos anticiparnos a lo que nos pueden pedir en la entrevista,
prepararla, indagar sobre la empresa para la cual vas a hacer la entrevista,
repasa los consejos para elaborar una entrevista, revisa tu currículo, etc.
Todo esto rebajará tu nivel de nerviosismo y te proporcionará recursos a la
hora de contestar las preguntas.
Otra de las cuestiones que te tenemos que tener en cuenta en el proceso de búsqueda de empleo, es nuestra actitud. El primer recurso y principal obstáculo en el camino hacia el empleo somos cada uno de nosotros. La búsqueda de empleo es, en muchos casos, una cuestión de actitud.
No podemos
esperar a que nuestra situación de desempleo se arregle sola (actitud pasiva). La frase "esperar
a que te vengan traer el trabajo a casa" nos da una idea de lo que es una
actitud pasiva. Esta actitud muchas veces puede venir dada por pensar que no podemos hacer nada,
entonces, por qué esforzarse?
Afirmaciones
como: "y si no hay trabajo a dónde quieres que lo vaya a buscar”, “si los
jóvenes no lo encuentran cómo quieres que lo encuentre yo”, "la situación
está complicada", "mis amigos y los demás tampoco encuentran trabajo",
son muy típicas de los que adoptan un rol pasivo.
Pero también se puede dar una actitud pasiva derivada del desconocimiento de las posibilidades de búsqueda. Son numerosas las vías que podemos seguir y las herramientas que podemos usar, pero primero hay que conocerlas para poder emplearlas.
Aunque la
búsqueda de empleo constituya una tarea nada fácil, no puedes caer en la
pasividad ni en el desánimo, ya que rara vez aparece un puesto de trabajo sin
que exista un esfuerzo previo por parte de la persona que lo demanda.
Buscar Trabajo es un Trabajo
En este difícil, y a veces largo, proceso de búsqueda de empleo, debes mantener siempre una actitud positiva, constante, activa y planificada.
Para comprender mejor lo
que os intento transmitir, os dejo un vídeo que, a través del cuento refleja la
importancia de nuestra actitud ante situaciones de cambio. Quién se ha llevado mi queso?
Encontrar un empleo conlleva la toma de una serie de decisiones que requerirán que contemos con la mayor cantidad de información posible relativa tanto al mercado laboral como a nosotros mismos.
Si somos conscientes, desde el principio, de nuestras
fortalezas y debilidades y el valor que determinadas habilidades adquieren
en el mercado de trabajo, estamos a tiempo de potenciar las primeras. En cuanto
a las segundas, nuestras debilidades, el hecho de tomar conciencia de
ellas ya es un primer paso para tratar de minimizarlas al máximo.
Es una tarea
complicada, pero en la red existen multitud de herramientas que nos ayudan a la reflexión y a obtener un mayor conocimiento de uno mismo.
A continuación os dejo una serie de enlaces, como muestra de estas
herramientas, las cuales nos sirven de ayuda para conocer nuestros puntos
fuertes y débiles y saber en qué y cómo podemos mejorar.
Porta 22 (BCN activa): Balance profesional I: Autoconocimiento
Porta 22 (BCN activa): Balance profesional I: Autoconocimiento
Lo común en muchas de las personas que buscan empleo es que desconocen las cartas que manejan.
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